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viernes, 12 de octubre de 2012

Salud dental durante el embarazo, lactancia y el bebé/niño


En nuestra reunión mensual  del pasado 5 de septiembre de 2012, tuvimos la fortuna de contar con la presencia de la Odontóloga María Gimena Bergamasco, que nos ofreció una interesantísima charla sobre salud bucal. Gimena es madre de una niña de 18 meses. Nació en Argentina, estudió en la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), provincia de Buenos Aires. Reside en Zamora desde enero del año 2006. Convalidó sus estudios a Licenciada en Odontología en la Universidad de Santiago de Compostela (USC) en el 2008. Trabaja como odontóloga en Zamora desde ese año y con clínica propia desde Octubre del 2011, donde se ocupan de todas las especialidades, fundamentalmente: Implantología y Odontopediatría y Tratamientos del dolor Orofacial. Además fue profesora de las Cátedras de Anatomía y Cirugía Dentomaxilar.

Gimena nos habló desde su punto de vista personal materno y desde su experiencia profesional.
Su charla giró alrededor de tres aspectos de la salud bucal:
1.- Embarazo.
2.- Lactancia.
3.- Bebé y niño.

Salud bucal en el embarazo.
Es importante tener en cuenta el estado general de la mujer al momento de quedar embarazada. Si antes del embarazo sufre caries o enfermedades periodontales (es decir, aquellas que afectan al modo en el que el diente está sujeto al hueso) estos problemas se agravarán.
El mito de que con” cada embarazo se pierden dientes” no es más q eso, un mito; debido a que el aumento de la demanda de calcio requerido por la gestante no proviene del calcio de sus propios dientes, ya que el mismo no está “Disponible” químicamente para pasar a la placenta.
Por eso, sí se recomienda la ingesta oral de 1mg/dia de flúor a partir del 4º mes de gestación, q es cuando comienza la CALCIFICACIÓN de los dientes temporales.
El control de la placa bacteriana es fundamental. Ésta es una película adherente, que se forma en los dientes luego de cada ingesta de comida y su no posterior cepillado. Siempre se elimina con un correcto el cepillado, pero en algunas zonas se acumula y se endurece con el tiempo y desemboca en la formación de sarro. El sarro afecta a la encía, que se inflama a expensas de un aumento se riego sanguíneo, produciéndose así una gingivitis. El resultado más visible es el sangrado de la encía.
Por otro lado, como sabemos en las embarazadas se dan varios cambios fisiológicos, debidos a los cambios hormonales producidos por las hormonas segregadas por la placenta, y que repercuten en el estado general de la embarazada y su salud odontológica. Las encías sufren un aumento de volumen, una gingivitis gestacional, que es sufrida por un 80% de las embarazadas, a pesar de tener una correcta higiene bucal. Esta gingivitis gestacional, es fisiológica y se manifiesta con: inflamación excesiva de las encías, sangrado espontáneo de las mismas, más localizado en el maxilar superior, y con una mayor sensibilidad en las encías, el cepillo de dientes habitual puede causar irritación, por lo que debe usarse uno más suave. Desaparece tras el parto.
Es fundamental el control de placa bacteriana y corregir la técnica de higiene en la mujer embarazada, agregar determinados colutorios o enjuagues bucales según la necesidad y prevenir cualquier infección.

Como hemos comentado, las patologías bucales previas avanzan más rápidamente durante el embarazo. Para el tratamiento odontológico es muy importante en qué mes de embarazo se encuentre la mujer.
Es falsa la creencia de que el control odontológico está contraindicado en embarazadas, pues la salud debe ser integral. Una caries, sobre todo a nivel medio o avanzado, es un foco séptico que causa infección, dolor…y debe ser eliminado.

PROTOCOLO PARA LA ATENCION ODONTOLÓGICA SEGÚN TRIMESTRES GESTACIONALES:
1 TRIMESTRE:
- Tratamientos dentales de emergencia.
-Recomendaciones sobre higiene bucal y control de placa.
- Limpiezas, pulido o raspajes (según necesidad) q son limpiezas más profundas generalmente por sectores de la boca y bajo anestesia.
-Prohibidas las radiografías

2 TRIMESTRE
- Trat. Dentales de emergencia y específicos (como empastes, etc)
-Recomendaciones sobre higiene bucal y control de placa.
- limpiezas, pulido o raspajes (según necesidad) q son limpiezas más profundas generalmente por sectores de la boca y bajo anestesia.
-Radiologías bajo protección .

3 TRIMESTRE
- Trat. Dentales de emergencia .
-Recomendaciones sobre higiene bucal y control de placa.
- limpiezas.
-Radiologías bajo protección .

Cuando la caries está ya está instalada desarrollada, durante el primer trimestre del embarazo se procura no hacer muchas intervenciones de complejidad así como no sacar como las radiografías. Si la embarazada necesita una endodoncia se le realiza un tratamiento de urgencia: anestesiar, abrir el diente, quitar la infección-el nervio- tapar provisionalmente y esperar al segundo trimestre cuarto o quinto mes para hacer una radiografía (siempre con protección de delantal plomado), de modo que el dentista pueda ver el conducto del diente, y poder sellarlo definitivamente.
Durante el primer trimestre la atención se focaliza en el control de la placa bacteriana y en mejorar la técnica de higiene si fuera necesario.
El segundo trimestre es el ideal para hacer las intervenciones necesarias.
La anestesia no está contraindicada en el embarazo. En odontología la anestesia tiene un vasoconstrictor que puede estar presente en menor medida.
En ocasiones pueden ser necesarias dos limpiezas bucales durante el embarazo.
Se deben de tener en cuenta tres premisas a la hora de administrar un fármaco a una embarazada:
  1. Intentar no prescribir nada durante el primer trimestre.
  2. En caso necesario, utilizar los que se tenga certeza absoluta de su inocuidad, como es el caso, entre los antibióticos de la penicilina o sus derivados (amoxicilina y ampicilina) y eritromicina para alérgicas a la misma.
  3. Intentar consultar siempre q se pueda con el ginecólogo o matrona que siga el embarazo.
En el cuarto mes de gestación comienza el proceso de calcificación dentaria del feto, por ello hoy en día está prohibida la administración de tetraciclinas, pues alteran el color de los dientes. Los analgésicos recomendados son paracetamol e ibuprofeno. Se desaconseja el ácido acetilsalicílico (aspirina) por su efecto anticoagulante.
Los suplementos de flúor son muy importantes a partir del cuarto mes de embarazo.
Odontológicamente se considera grupo de riesgo a las embarazadas con ciertas patologías de base: diabetes, problemas de corazón…

Salud bucal durante la lactancia.
Existe un cúmulo de creencias en cuanto a que lo que comamos, hagamos… influirá en el sabor de la leche y que todos medicamentos están contraindicados durante el período de lactancia. Un buen recurso para consultar la compatibilidad o incompatibilidad de los medicamentos con la lactancia materna es la siguiente web:
www.e-lactancia.org
Dicha web ha sido realizada desde el año 2003 por el equipo del Servicio de Pediatría del Dr. Paricio en el Hospital Marina Alta de Denia (Alicante).
La opinión de Gimena es que a nivel odontológico los antibióticos deberían evitarse durante la lactancia, siempre que pueda tratarse sin ellos el agente causal. Si fuera imprescindible su uso se debería hacer con el consejo del médico de familia o ginecólogo controlando mucho las dosis y los tiempos.
Durante la lactancia lo ideal es hacer los tratamientos diferidos durante el período de latencia, es decir, entre toma y toma, para dar tiempo al cuerpo de la madre lactante a metabolizar la anestesia antes de la siguiente toma.

Salud bucal de bebés y niños.
Gimena cree que no existe una cronología dentaria que indique a qué edades exactas aparecen los dientes. Debido a los grandes cambios sociales culturales y en alimentación de estos tiempos. Por lo que el primer molar permanente que debería de aparecer en boca a los 6 años de edad, no es raro verlos en niños a los 5 años., y en perfecto estado, asi como el recambio de los incisivos tanto superiores e inferiores ha sufrido muchas alteraciones, siempre considerándolo dentro de unos parámetros normales.
Tradicionalmente se decía que hacia los seis años se comienzan a perder los dientes de leche y aparecen los dientes permanentes. En los últimos años esto se ha adelantado a los cinco años.
Los atrasos o adelantamientos en la aparición de dientes no son indicativos de nada patológico.
El orden de erupción de los dientes temporales o de leche en el que salen los 20 dientes de leche es:
1º.- Incisivos Centrales superior e inferiores: 8-12 meses
2º.- Incisivos laterales Superiores e inferiores: 9- 13 meses.
3º.- Incisivos superiores Primeros molares superiores e inferiores: 13 -19 meses
4º.- Molares temporales en ambas arcadas. Segundos: 22 – 32 meses
5º.- Caninos en ambas arcadas. 16 -22meses. Estos caninos son los más dolorosos al salir porque tienen una gran raíz. En los bebés unos cinco días antes de la erupción puede aparecer fiebre, dolor, apatía, pocas ganas de comer… Una vez que el diente ha salido las molestias son sólo locales y es entonces cuando les alivian las cosas frías.
Las otitis, al contrario de lo que se suele creer, no tienen que ver con la salida de los dientes. Sí que pueden darse reflejos dolorosos de la mandíbula que repercuten en el oído o viceversa.
Los primeros molares permanentes salen hacia los seis años. Estos molares, al ser los primeros en salir, son los que antes se deterioran porque llevan más tiempo en la boca. Por ello es muy importante percibir cuando erupcionan y sellarlos rápidamente para que no se lesionen.
Está altamente contraindicado untar los chupetes de los bebés en azúcar. Las caries de biberón son destrucciones importantes, profundas y dolorosas en el tiempo, en los dientes temporales, sobre todo de los incisivos superiores por la ingesta excesiva de azúcares, ya sea en el chupete o biberón, durante un tiempo excesivo. Hay que tener en cuenta que es esmalte de los dientes de leche no es tan duro como el esmalte de los dientes definitivos. Por lo que si se rompe o desgasta avanza más rápidamente cualquier episodio de caries.
Los niños pueden comer lógicamente azúcar. Ya sea a traves de chucherías, zumos, etc. Lo importante es la cantidad de veces q se ingieren a lo largo del día o también lo llamamos momentos de azúcar y que tras ingerir azúcar tengan una adecuada higiene dental.
Es normal que en un niño de entre tres y cinco años los dientes de leche aparezcan pequeños y cada vez más separados. Esto ocurre porque las mandíbulas crecen para alojar los dientes definitivos, que son más grandes.
El reemplazo de dientes de leche por los definitivos es gradual. Este proceso se produce gracias a que el diente definitivo reabsorbe o “come” la raíz del diente de leche, hasta que solo queda la corona. Hay un período de tiempo en que el niño tiene en boca dientes de lecho y dientes permanentes, todos “conviviendo”. En este período, el arco dental se llama MIXTO .
Puede ocurrir que en el recambio no se produzca esta reabsorción y que los dientes definitivos salgan sin que hayan caído los de leche, por lo que se superponen y conviven ambos en la boca. Esto debe de evaluarse si es algo temporal y el de leche se caerá o quizás sea necesario quitarlo en consulta.
Otras veces este recambio no se produce porque existe una RETENCIÓN en el hueso del diente definitivo queda retenido (la retención de caninos superiores ocurre muy normalmente es hereditaria y se puede predecir con una consulta a determinada edad). En tal caso es necesaria una evaluación radiográfica para valorar si es necesaria la extracción del diente de leche o cómo guiar el tratamiento, o saber si será necesaria la recolocación con un tratamiento de ortodoncia. Una opción sencilla para diagnosticar retenciones es realizar una radiografía panorámica que muestra los dientes de leche si permanecen. También puede hacerse una radiografía intraoral en consulta.
Otra cosa son las AGENESIAS DENTALES: que es cuando el diente de leche no es reemplazado por su correspondiente definitivo, porque no existe. Es decir que nunca se ha formado. Son comunes los premolares inferiores Otras retenciones comunes son las de premolares inferiores. Se diagnostica muy bien radiográficamente.
Son recomendables las consultas anuales, a partir de los tres años, y controlar la aparición normal de los dientes, la higiene, y si necesita o no suplementos de flúor. Una vez que aparezcan los dientes permanentes las consultas deben ser anuales para poder diagnosticar cualquier problema en un estadio inicial, que es más fácil de tratar.
En cuanto a la higiene dental infantil, debemos considerar que los niños adquieren la motricidad suficiente para cepillarse correctamente sobre los nueve años. Antes de eso, los niños necesitarán ayuda (aunque tal vez no nos permitan que les lavemos los dientes), pues no suelen ser capaces de quitarse por sí mismo la placa bacteriana. Hasta entonces es muy positivo que aprendan el hábito de lavarse los dientes, pues estas costumbres permanecerán para toda la vida. Es importante establecer como mínimo el hábito del cepillado por la noche (nunca irse a dormir sin lavarse los dientes).
Las pastas de dientes sencillas son válidas si la salud dental es óptima. Las pastas infantiles incluyen colores llamativos, dibujos, olores… que cumplen la función de motivar a los niños para su uso.
Hay niños con policaries en los dientes de leche. Aquí es importante su correspondiente tratamiento y tratar sus causas para prevenirlas en los dientes permanentes. Estas caries pueden afectar a los dientes permanentes en ciertos casos. Si se da una caries en un diente de leche es fundamental su tratamiento para no tener que llegar como última opción a la extracción. El dentista deberá valorar si es más conveniente dejarlo o extraerlo.
El uso de flúor es efectivo de manera tópica (sobre los dientes) en consulta cada seis meses, sobre todo cuando la dentición es mixta (dientes de leche y permanente). Es importante evitar el exceso de flúor porque provoca pigmentación marrón en los dientes. Además, si el niño recibe flúor en la consulta, no debería recibirlo en el colegio y al revés. Por otro lado hay que tener en cuenta que el agua potable también tiene cierta concentración de flúor, dependiendo del lugar. Cuando el niño recibe flúor es importante que no consuma nada durante la hora siguiente, y mucho menos lácteos durante las siguientes 8 o 12 horas, ya que el flúor se une al calcio de la leche y se elimina por lo que no nos serviría su efecto.

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